Esa es la chica que yo era entonces: tropezaba y me hundía, perdida en la brillantez y en el espacio. Mi pasado había sido borrado por completo, lavado con lejía hasta convertirlo en un blanco puro y desnudo.
Somos cosas tan pequeñas, tan tontas...
En un mundo sin amor, eso es lo que somos las personas: valores, beneficios y cargas, números y datos. Sopesamos, cuantificamos, medimos, y el alma se queda reducida a polvo.
Si nos quitas algo, nosotros te quitaremos otra cosa. Si nos robas, te robaremos hasta la camisa. Si nos presionas, golpearemos.
Esa es la forma en que funciona el mundo ahora.
Eso es lo que hace el odio. Te alimenta y al mismo tiempo te va pudriendo.
Es duro, profundo y afilado, un sistema que bloquea. Es completo y lo abarca todo.
Esa es la desventaja de la libertad: cuando eres completamente libre, también estás completamente solo.
Entonces se me ocurre que las personas mismas están llenas de túneles: sinuosos espacios oscuros y cavernas imposibles de conocer. Imposibles incluso de imaginar.
Lauren Oliver